La lluvia persistente, nos corría una y otra vez.
Los tambores, insistentes, volvían a sonar una y otra vez.
Para mí que el arbolito quería ser protagonista, una y otra vez.
La voz es del Tambor
2 ene 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario